Lo demás es historia: 50 Años de Dudenhofen.

Cuando compramos un vehículo, siempre hemos tenido en cuenta factores como el diseño, el motor o el precio, pero también, nos fiamos mucho de lo que nos comenta la gente de nuestro alrededor sobre sus experiencias particulares . Y como un coche le haya salido "malo" a uno de nuestros conocidos..., podíamos decir que ese vehículo ya está sentenciado por mucho que nos guste. En realidad, no somos conscientes de hasta qué punto ha tenido que sufrir ese modelo antes de pisar los concesionarios y de los test extremos que han tenido que superar de manos de los ingenieros más despiadados. La fama de que un coche tenga mayor o menor fiabilidad, tan solo puede venir de los típicos errores en una producción en cadena, así que suele ser circunstancial, o simplemente; el hecho de haber montado una serie de componentes, normalmente procedentes de proveedores externos, que estuvieran defectuosos. En muy rara ocasión ,se debe a un fallo de diseño, ya que los expertos de